Reseña:

Los individuos no abandonan su identidad política y cultural anterior al sumarse a un nuevo movimiento, sino que la resignifican. Así, el peronismo no es simplemente nacionalismo más catolicismo conservador tamizado a través de viejos socialistas: en realidad es un fenómeno político totalmente distinto que emerge de la amalgama de elementos de todos los anteriores. En ese sentido, la izquierda peronista es parte de un proceso histórico determinado, y si bien no deja de tener las características (y antecedentes) del peronismo clásico, ha incorporado ideas, necesidades y términos propios de su época. Germán Gil reflexiona sobre todo ese proceso histórico y sobre los seres humanos que lo generaron y que fueron producto a su vez del mismo. Entender que "la izquierda peronista" fue un fenómeno-propio de 1950-1976 nos permite también comenzar a reflexionar sobre porqué hoy no hay una nueva izquierda peronista. Gil se identifica con la hipótesis de Gillespie cuando dice que "los Montoneros son parte del heterogéneo conglomerado peronista, no más diferente que otros que, en el interior del movimiento, luchan per el poder" Ambos contribuyen a una perspectiva única, donde Montoneros (o Peronismo de Base) no dejan de ser peronistas ya que este es un movimiento proteico que toma las características de su época. De tal forma, Germán Gil contribuye a una discusión central a la historia argentina reciente, y también a comprender el desarrollo político futuro" (de las palabras preliminares de Pablo Pozzi).