Reseña:

He aquí dos guiones del realizador de "Por si no te vuelvo a ver y Los niños de Morelia". Ambos fueron escritos en el periodo intermedio entre las dos películas. Y hasta la fecha ninguno de los dos han llegado a la pantalla. En el primero, titulado "El hermano zurdo", se narra el encuentro de Frank y Antonio, dos medios hermanos: norteamericano uno, mexicano el otro. Frank tiene 16 años, apenas habla español, es extrovertido y alegre. Antonio es un poco mayor, pero con un carácter totalmente opuesto, de hecho: difícil. Habitan culturas distintas, hablan diferentes idiomas, apenas pueden comunicarse, pero Frank ha llegado a México, escapando de su familia, para tener un hermano mayor, para exigirle que se ocupe de él y además que lo quiera. Los enfrentamientos no se hacen esperar. Con ellos llegan las alianzas, el delito, la amistad con Bichi, una chica gorda y peleonera que se hace pasar por ciega para estafar turistas, el descubrimiento del campo provinciano y, sobre todo, el aprendizaje de la sabiduría ancestral. En el pasado la gente veía o creía ver fantasmas, demonios y santos. La actualidad reclama apariciones más probables, presencias ajenas a lo sobrenatural; algo más cercano al pensamiento racional y su evolución. Persiste la necesidad de creer. Continúa la búsqueda de consuelo y protección depositada en entidades superiores, así como el deseo de ser elegidos por ellas, o bien, el temor a su castigo. Éstos son los temas que platea "Los no identificados". Una historia en la que se habla también de la inmensa industria que representa lo desconocido: ese mundo colmado de teorías pseudocientíficas, estafas, religiones alternativas, manipulaciones mediáticas y preguntas sin respuesta.